El mundo de la música y del cine está de luto, se ha ido uno de los grandes. El mítico cantante y compositor David Bowie ha fallecido a los 69 años, después de luchar 18 meses contra el cáncer. Por ello, desde aquí quiero rendir este pequeño homenaje en el que analizaré su corta trayectoria como actor.
El debut de Bowie
El artista londinense comenzó su carrera interpretativa al experimentar varios fracasos como músico, cuando decidió estudiar mímica en el teatro Sadler's Wells. Su primer papel protagonista llegó en 1976 con El hombre que cayó a la tierra, una producción del director Nicolas Roeg basada en la novela de Walter Tevis. La cinta cuenta la historia de Thomas Jerome Newton (Bowie), un alienígena que llega al planeta con el objetivo de obtener agua para su mundo natal.
Tres años más tarde trabajaría en una producción alemana liderada por el realizador germano David Hemmings titulada Gigolo (Just a Gigolo), en la que Bowie encarnaba a un joven coronel llamado Paul von Przygodski que regresa de la guerra, tras pasar varios meses en coma, se da cuenta de que el mundo que conocía ha cambiado drásticamente.
En 1983, la cinta bélica Feliz Navidad, Mr Lawrence, dirigida por Nagisa Oshima y protagonizada por David Bowie (Jack Celliers), Tom Conti (John Lawrence) y Ryuichi Sakamoto
(Yonoi), está basada en el libro The seed and the sower de Laurens van der Post y cuenta la llegada de Jack Celliers, un soldado australiano, a un campo de prisioneros japonés durante la Segunda Guerra Mundial. Ese mismo año, el cantante también protagonizó El ansia (The Hunger), ópera prima del hermano pequeño de Ridley en la que Bowie interpretaba al amante chupasangre de la matriarca Catherine Deneuve.
Pero no fue hasta 1986 cuando llegó su gran éxito mundial, gracias al cineasta inglés Jim Henson, creador de los Teleñecos. Dentro del laberinto le ofreció a Bowie uno de los papeles cinematográficos más recordados de la historia del cine: el personaje de Jareth, Rey de los Goblins.
Y para finalizar, su última incursión en la gran pantalla fue en 2006, en El truco final (El prestigio), donde acompañó a Christiane Bale, Hugh Jackman y Scarlett Johansson, cinta dirigida por Christopher Nolan
y ambientada en el siglo XIX, que cuenta la lucha entre los dos magos
más famosos de su tiempo, primero amigos y luego enfrentados en una
feroz competición por superar al otro y acabar con él.
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